El Vincent's

Efectivamente, un hotel con encanto. Ya habíamos pasado innumerable veces por delante camino del Malaysia, pero creíamos que se trataba de un restaurante no nos habíamos fijado en las 7 rooms.
Más que una habitación de hotel parece un apartamento. La habitación es enorme y tiene hasta microondas. En su decoración no podían faltar posters de Van Gogh. Podéis verlo en su web: http://www.vincentsbangkok.com
Hoy como era domingo teníamos cita obligada al mercado de fin de semana, CHATUCHAK. Yo diría que es el mercado más grande del mundo. Si en el Lumphini dicen que hay 3500 tiendas, aquí por lo menos hay que multiplicarlo por 4 o 5. Te pierdes, irremediablemente, te pierdes. Mejor no dejar la opción de ya volveré, dificilísimo volver a encontrarlo. Es una especie de laberinto de calles muy estrechas atiborradas de pequeñas tiendecitas y, por supuesto, gente.
Tiene su parte cubierta y otra descubierta. Entremedias, chiringuitos de comida. Tu eliges. Hay que planificar pasar todo el día.
Aquí nos hemos abastecido de ropa fresca para el viaje y por supuesto, de unas flip flops, unas chanclas, para los que no saben lo que son.
En metro se llega directamente.
Para cenar hemos visitado un antiguo conocido. Un restaurante japones que se encuentra en pleno PATPONG, el barrio del cachondeo, pero que entre y entre hay pequeños restaurantes japoneses, todos con muy buena pinta, es cuestión de hacerse un pequeño estudio.
De menú hemos optado por un clásico: sushi, gyosa, tempura... los precios un poco japoneses, pero muy original.
De regreso una pastelería, Secret Recipe, con el escaparate poblado de tartas de un palmo de altas a cual más escandalosa, se encontraba de happy hour, 2 x 1, y hemos sucumbido a la tentación.
Nuestro hotel esta a una estación de metro de PATPONG.
Se que estais ansiosos de fotos, todo se andará, estamos de adaptación.