Angkor

Hoy es nuestro último día en Siam Reap. De los siete días que hemos estado en esta población, 6 se los hemos dedicado a Angkor. Una maravilla de este calibre, bien se merecía su tiempo. Hemos visitado todos los templos, algunos dos veces a diferentes horas. Los hemos escalado, rodeado, contemplado, admirado, etc... Algunos días lo hemos hecho intensivo, otros nos veníamos al pueblo a comer y descansar para despues volver a la puesta de sol.

Estamos teniendo unos días estupendos de sol. Hace calor, pero ha caído algún chubasco que ha ido limpiando la atmósfera.
Luego por la noche, paseillo, cena, coctel y poco más.
Gastronómicamente hablando Siem Reap en general no es gran cosa a pesar de tener muchos restaurantes y algunos buenos. Es un sitio demasiado turístico y por tanto muchos gustos que complacer. La mayoría de ellos tienen una extensísima carta con diferentes tipos de comida. La espera también puede hacerse interminable.
Aún así recomiendo no perderse la langosta del Soup Dragon por 7$, todavía me dura el pringe de chupar cabezas. El pato, muy bueno también.
Una joyita china: Hong Kong al inicio de la calle del hospital. Un especialista en Dim san (dumplings). Muy bueno. El propietario trabajó en Alemania y en tres ocasiones visitó Mallorca.